Aranceles a los coches eléctricos chinos en la Unión Europea

A pesar de ser temporales y pendientes de revisión, los derechos compensatorios que la Unión Europea está aplicando a los coches eléctricos importados desde China ya se están implementando desde julio y no se devolverán, incluso si se retiran por completo.

Barreras comerciales para equilibrar la competencia

Estos derechos compensatorios, comúnmente conocidos como aranceles, buscan contrarrestar el supuesto trato preferencial que China otorga a los fabricantes que producen en su suelo, ofreciendo productos en el mercado europeo a precios más bajos. Esta ventaja competitiva perjudica a los fabricantes europeos que producen sus vehículos en territorio europeo.

La medida de los derechos compensatorios, que se revisará en noviembre, implica una tarifa específica para cada fabricante, basada en una investigación europea que busca determinar en qué medida el Gobierno chino ha contribuido a la comercialización de productos a precios inferiores a los de la competencia en Europa. Además, si se retiran, la Unión Europea no está obligada a devolver los pagos realizados por los fabricantes.

Todo esto se traduce en que marcas chinas como BYD enfrentan un derecho compensatorio del 17,4%, además del arancel del 10% habitual para la importación de este tipo de vehículos. Por otro lado, Tesla deberá pagar un 9% adicional por los Tesla Model 3 importados desde China. Sin embargo, SAIC deberá pagar un 36,3% de arancel debido a que no colaboró con la investigación de la Unión Europea.

Soluciones buscadas por las compañías

Ante esta situación, las compañías están buscando alternativas para enfrentar el problema. Polestar, propiedad de Geely, importará sus vehículos desde su planta en Estados Unidos para beneficiarse de condiciones más favorables y mantener su presencia en Europa, a pesar de enfrentar un derecho compensatorio del 19,3% más el arancel del 10%.

De manera similar, SAIC planea importar sus vehículos desde Tailandia para mantener competitivo al MG4 Electric, que fue el cuarto coche eléctrico más vendido en Europa en 2023. También se ha considerado la opción de trasladar la producción de vehículos eléctricos a Europa, como en el caso de BYD que fabricará en Hungría y Turquía.

En este sentido, MG también podría importar sus coches desde Tailandia, donde ya tiene una planta productora. Sin embargo, esto plantea algunos desafíos, ya que Tailandia nunca ha exportado coches a Europa y no hay un tratado comercial entre ambas regiones.

Desafíos y posibilidades

Si se llegara a establecer un acuerdo comercial entre Tailandia y la Unión Europea, existen requisitos que deben cumplirse, como que al menos el 40% de los componentes del vehículo sean producidos en Tailandia o en la región, así como cumplir con los estándares de seguridad europeos. Aunque hoy en día la importación de vehículos desde Tailandia sigue siendo una opción, es claro que las compañías chinas están buscando la manera de llevar sus coches a Europa al menor costo posible.

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