El coche eléctrico chino busca conquistar nuevos mercados más allá de China, y una de las estrategias clave es su uso como vehículos de transporte con conductor. En este sentido, BYD y Uber han llegado a un acuerdo para que la compañía china suministre 100.000 vehículos eléctricos a Uber en los próximos años.
Un acuerdo más allá del suministro de coches
El acuerdo entre Uber y BYD ha sido confirmado por ambas compañías. BYD suministrará 100.000 nuevos vehículos eléctricos en los próximos años a Uber, aunque no se especifica la duración concreta del acuerdo. Sin embargo, se destaca que los conductores que se acojan al acuerdo contarán con mejores condiciones para adquirir los vehículos.
El comunicado del acuerdo revela dos puntos interesantes. En primer lugar, se excluye a Estados Unidos del acuerdo, mencionando otros mercados cercanos como Canadá. En segundo lugar, se confirma que Europa y América Latina son los mercados prioritarios para BYD a corto y medio plazo. Aunque se menciona que Uber contará con vehículos BYD en Canadá, Nueva Zelanda, Australia y Oriente Medio, se enfatiza la importancia de Europa y América Latina en este despliegue.
BYD tiene grandes expectativas en Europa, habiendo colaborado con la Comisión Europea para minimizar las sanciones económicas en sus exportaciones de automóviles. Además, han inaugurado una planta en Hungría y planean una segunda en Turquía.
El reto de convencer a los clientes
Aunque BYD ve a Europa como un mercado potente, todavía debe convencer a los clientes de su fiabilidad. A diferencia de MG, BYD no se centra únicamente en el precio, sino en demostrar que son dignos de confianza. El acuerdo con Uber les permitirá demostrar la fiabilidad de sus coches y dar a conocer la marca a potenciales clientes que quizás no la conozcan.
Además, al entregar vehículos a Uber, los coches estarán en circulación la mayor parte del día, lo que ayudará a demostrar su fiabilidad y a servir como escaparate para la marca.