Un nuevo estudio de Accenture revela que más de la mitad de los conductores del mundo planea adquirir un coche eléctrico en los próximos diez años, marcando un cambio significativo en las preferencias de movilidad.
La encuesta global, realizada entre 6,000 conductores de Estados Unidos, Europa y Asia, destaca el crecimiento del interés por los vehículos sin emisiones como alternativa al transporte tradicional, aunque con matices entre regiones.
Crecimiento global con China a la vanguardia
El 57% de los conductores encuestados a nivel mundial prevé adquirir un vehículo eléctrico (VE) en la próxima década. Mientras, sólo un 10% descartó por completo esta posibilidad, reflejando una apertura significativa hacia la movilidad sostenible.
China lidera esta transición: 65% de los encuestados chinos confían en el futuro de los VE. Además, un 44% de quienes aún no poseen uno planean comprarlo en los próximos cinco años, situando al país asiático como pionero en la adopción de esta tecnología.
En Estados Unidos, el interés también va en aumento, con un 54% de conductores mostrando intenciones de compra. Sin embargo, Europa presenta un panorama diverso, con países como Alemania y Francia reportando índices más bajos de entusiasmo, del 37% y 36%, respectivamente.
Europa: un mercado en transición
En el continente europeo, el crecimiento de las ventas de vehículos eléctricos es evidente, aunque su ritmo es más lento en comparación con Asia y América.
Mientras Bélgica y los Países Bajos muestran un avance sólido, Alemania y Francia permanecen rezagadas en términos de percepción positiva hacia los VE. A pesar de ello, la región sigue avanzando hacia una mayor adopción, impulsada por regulaciones y subsidios gubernamentales.
Estados Unidos, por su parte, se ha consolidado como el segundo mayor mercado de VE en 2024, solo detrás de China.
¿Qué buscan los consumidores en los vehículos eléctricos?
El perfil del comprador de coches eléctricos ha evolucionado. Hoy, fiabilidad, seguridad y relación calidad-precio son los tres factores más valorados, según el estudio. Estos atributos, citados por más del 80% de los encuestados, han superado a la sostenibilidad como principal motivación de compra.
Por otro lado, las preocupaciones relacionadas con la infraestructura siguen siendo significativas. El 70% de los conductores considera esencial contar con opciones de carga en casa y en espacios públicos. Asimismo, la autonomía del vehículo se posiciona como un factor crítico, con un 81% destacando la importancia del tamaño de la batería y su alcance.
Un mercado en expansión
El creciente interés por los VE ha impulsado a los fabricantes de automóviles a diversificar su oferta. Desde modelos económicos diseñados para entornos urbanos hasta SUV de lujo, el mercado busca responder a las demandas de una base de consumidores más amplia y diversa.
Sin embargo, la adopción masiva de esta tecnología aún enfrenta retos. Factores como la infraestructura de carga, la autonomía y el costo inicial siguen siendo barreras clave para muchos compradores potenciales.