Europa ha experimentado un crecimiento significativo en la adopción del coche eléctrico, impulsado por decisiones a largo plazo de los fabricantes y el enfoque en esta tecnología. Esta tendencia ha dado lugar a que China también entre en el mercado de los vehículos eléctricos. China no solo cuenta con importantes fabricantes de coches eléctricos, sino que también domina la cadena de suministro, incluida la producción de baterías. Como resultado, Corea del Sur está tratando de recuperar su posición en el mercado de baterías en Europa. Sin embargo, el continente europeo enfrenta un desafío importante: la dependencia de la producción de baterías en China.
La falta de producción de baterías en Europa
Como resultado de las normas de emisiones más estrictas en Europa y el enfoque en los vehículos eléctricos, se ha creado una escasez de producción de baterías en el continente. La dependencia de China en este sentido es insostenible a corto plazo. Para competir con China y garantizar un suministro adecuado de baterías, la empresa Northvolt se propuso convertirse en el principal productor de baterías de Europa. Volkswagen está respaldando este proyecto con una participación del 21% en la empresa. Sin embargo, Northvolt ha anunciado recientemente que planea despedir a 1,600 empleados, lo que representa una cuarta parte de su fuerza laboral.
El impacto limitado del mercado europeo de baterías
Según informes, Europa solo produce el 3% de las baterías utilizadas a nivel mundial. Se esperaba que para fines de esta década, Europa produjera el 25% de las baterías utilizadas en todo el mundo. Para abordar este problema, Northvolt debería haber ampliado su capacidad de producción a 30 GWh, pero este proyecto ha sido descartado. Además, el gobierno alemán también tenía planes de ayudar en la construcción de una planta de producción de baterías. Sin embargo, la situación financiera de la empresa está en peligro y el gobierno sueco ha dejado claro que no proporcionará rescates.
Retos y controversias para Northvolt
Northvolt ha enfrentado varias dificultades en los últimos años, incluidos retrasos en la entrega y problemas de calidad con sus baterías. BMW canceló una inversión millonaria debido a estos problemas, y otras empresas como Volkswagen y Scania también informaron retrasos en las entregas. Además, Northvolt ha sido acusada de verter productos químicos tóxicos cerca del Círculo Polar Ártico, lo cual ha sido desmentido por la compañía. A pesar de estas controversias, Northvolt aún busca establecerse como un jugador importante en la producción de baterías en Europa.