Mercedes confirma su apuesta por los vehículos de combustión pese a su objetivo de electrificación
Mercedes, la reconocida marca automovilística, había anunciado anteriormente su objetivo de convertirse en una compañía completamente eléctrica para el año 2030. Sin embargo, recientemente han confirmado que seguirán invirtiendo en el desarrollo de vehículos de combustión, siempre y cuando las condiciones del mercado lo permitan. Esta decisión se debe a que las ventas de coches eléctricos no han alcanzado las expectativas, y sus modelos de combustión siguen siendo populares entre los clientes.
Inversiones en desarrollo de combustión más tecnológica
El CEO de Mercedes, Ola Källenius, ha anunciado que la inversión inicial de 40.000 millones de euros para la electrificación de la compañía se ampliará en otros 14.000 millones de euros destinados al desarrollo de mecánicas de combustión más tecnológicas. Aunque no se ha especificado cuánto dinero se dedicará a esta partida, se espera que sea una inversión necesaria para cumplir con las regulaciones y seguir vendiendo coches con motores de combustión.
La apuesta por motores de combustión electrificados
Källenius ha explicado que la inversión en motores de combustión electrificados es necesaria para no ahogar repentinamente el negocio de combustión en 2027/28. La marca considera que los motores de combustión seguirán siendo parte integral de su negocio, y deben estar preparados para las regulaciones futuras. La Unión Europea ha aprobado la venta de motores de combustión neutros en carbono a partir de 2035, pero mientras tanto se buscarán reducir las emisiones a través de vehículos híbridos enchufables.
La aceptación del coche eléctrico aún es limitada
A pesar de los esfuerzos por promover los coches eléctricos, la aceptación de estos vehículos entre los clientes ha sido inferior a lo esperado. El modelo Mercedes EQS ha tenido menos ventas de lo previsto, mientras que los compradores siguen siendo fieles a los modelos de combustión, como el Mercedes Clase S. Aun así, Mercedes continúa trabajando en el desarrollo de un Clase S eléctrico, pero ha reconocido que están invirtiendo más dinero del previsto en motores de combustión.