Un empleado de Twitter recibe una millonaria compensación tras demandar a Elon Musk por despido injustificado.
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El tribunal de Estados Unidos falló en contra de Musk por no avisar con antelación suficiente a su personal.
Despido Repentino y Amenazante
El 28 de octubre de 2022, Elon Musk sorprendió al mundo con la compra de Twitter por 44.000 millones de dólares. En esa misma fecha, Musk envió un correo electrónico a todos los empleados de la red social, dando un ultimátum: aceptar seguir trabajando bajo las nuevas condiciones o renunciar voluntariamente en un plazo de 24 horas. Este correo, que fue recibido como una amenaza, desencadenó una serie de demandas por parte de los empleados afectados.
El Caso de Gary Rooney
Uno de los casos más destacados fue el de Gary Rooney, un alto ejecutivo de Twitter que había trabajado en la compañía durante nueve años antes de que fuera adquirida por Musk. Rooney, despedido de manera repentina, decidió demandar a Elon Musk por lo que consideró un despido injustificado. Según el contrato de Rooney, cualquier renuncia debía ser presentada por escrito, no a través de un formulario digital, como lo exigía el correo de Musk.
El Veredicto del Tribunal
El tribunal de Estados Unidos, basándose en un informe de 73 páginas elaborado por Michael MacNamee, funcionario de la Comisión de Relaciones Laborales de Irlanda (WRC), concluyó que el despido de Rooney careció de fundamento legal. El fallo determinó que Musk no cumplió con el aviso previo necesario y que la forma de renuncia impuesta no era válida. Como resultado, se ordenó que Rooney recibiera una compensación de más de 11 millones de pesos por daños y perjuicios.
Consecuencias para Elon Musk
Este veredicto representa un golpe significativo para Elon Musk, quien no solo ha sido criticado por su manejo de Twitter, sino que ahora enfrenta consecuencias legales por su falta de previsión y consideración hacia los empleados. La demanda ganada por Rooney podría sentar un precedente para otros empleados que fueron despedidos bajo circunstancias similares, abriendo la puerta a nuevas acciones legales contra Musk y su equipo directivo.