Descubra si sus problemas de velocidad de internet se deben a su enrutador Wi-Fi, cómo saber si es hora de actualizarlo y cuándo considerar un enrutador de malla.
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Si los sitios web tardan una eternidad en cargarse o la rueda de almacenamiento en búfer sigue apareciendo en medio de sus programas, la causa de sus problemas de Internet podría ser su enrutador Wi-Fi.
En general, los expertos recomiendan actualizar su enrutador al menos cada cinco años. Hágalo cada dos o tres años si utiliza muchos dispositivos domésticos inteligentes o si tiene el hábito de comprar las últimas computadoras portátiles, teléfonos y otros dispositivos Wi-Fi. Eso significa que probablemente hay muchos de nosotros que nos beneficiaríamos de la actualización a un nuevo enrutador en 2024. Aquí le mostramos cómo comprender todo eso y realizar la actualización correcta en el momento adecuado.
¿Sus problemas de velocidad son culpa del enrutador?
Un buen enrutador debería poder aprovechar al máximo cualquier velocidad de Internet por la que esté pagando, pero si su red parece más lenta de lo esperado, entonces deberá tomar algunas medidas para asegurarse de que su enrutador sea, de hecho, el culpable.
A veces, un simple reinicio es todo lo que su red necesita, así que comience con lo obvio y desconecte su enrutador y su módem, luego vuelva a enchufarlos. Dave Coleman, experto en Wi-Fi, autor y director de redes inalámbricas en la oficina del CTO de Extreme Networks, recomienda reiniciar los controladores de Wi-Fi en su teléfono, computadora portátil y otros dispositivos importantes. “Es sorprendente cómo esto resuelve alrededor del 90% de los problemas”, dice Coleman.
Intente omitir el enrutador por completo conectando su computadora directamente al módem con un cable Ethernet. Si el rendimiento en línea cableado es notablemente mejor que el inalámbrico a corta distancia, es una clara señal de que el enrutador no alcanza el potencial de su red.
Realice pruebas de velocidad en varios lugares de su casa usando diferentes dispositivos, como su teléfono y su computadora portátil. Me gusta la prueba de velocidad de Ookla, que es rápida, gratuita, confiable y fácil de usar. Estos resultados le darán una idea más clara de si el problema está relacionado con un dispositivo específico, una ubicación en su hogar, o si es un problema mayor que afecta a todo.
¿Es hora de actualizar a la próxima generación de Wi-Fi?
La tecnología y la seguridad de los enrutadores siempre mejoran y hemos visto avances significativos en los últimos años con la llegada de Wi-Fi 6, Wi-Fi 6E y, en los últimos meses, Wi-Fi 7. Avances generacionales como estos dejan a los enrutadores antiguos obsoletos, por lo que vale la pena actualizar a un enrutador que los admita tan pronto como tenga sentido hacerlo, incluso si el que está usando ahora todavía funciona.
Con muchos de nosotros pasando más tiempo en casa, actualizar su enrutador puede ser aún más atractivo. “La gente tiene problemas cuando mamá intenta hacer una llamada de Zoom, pero fracasa porque los niños están viendo videos de Netflix”, dice Coleman. Esa es una señal de que es posible que necesite actualizar su red Wi-Fi.
Actualizar a Wi-Fi 6, una generación más nueva de Wi-Fi que se adapta mejor a entornos densos y abarrotados, es definitivamente una forma de darle un impulso a su red. Y con la llegada de Wi-Fi 7 en 2024, ahora puede encontrar dispositivos Wi-Fi 6 y 6E a precios significativamente reducidos.
¿Necesita un enrutador de malla?
¿Su conexión es fuerte en algunos lugares de su hogar, pero débil o inexistente en otros? Si es así, actualizar a un sistema de malla, que utiliza múltiples dispositivos para ampliar el alcance de su red y difundir una señal más estable por toda su casa, podría ser una de las actualizaciones tecnológicas más significativas que puede realizar.
Los enrutadores de malla existen desde hace varios años, pero solo recientemente hemos visto opciones decentes disponibles por menos de $300. Ahora, en 2024, hay muchos sistemas para elegir, con precios que van desde modelos básicos que cuestan tan solo $150 hasta sistemas de primera línea que cuestan hasta $1,000.
El diseño de tres bandas, que agrega una segunda banda de 5 GHz para servir como un canal de retorno dedicado para las transmisiones entre el enrutador principal y sus satélites, ha sido la mayor diferencia en mis pruebas, y vale la pena pagar un poco más por ello.
Tu enrutador no puede hacer milagros
Es importante comprender que su enrutador no genera velocidad ni ancho de banda: toma el ancho de banda que está pagando a su proveedor de servicios de Internet y lo envía a su hogar para que los dispositivos inalámbricos puedan conectarse. Si, para empezar, el ancho de banda entrante es limitado, realmente no hay mucho que su enrutador pueda hacer al respecto.
Con el tiempo, las mejoras en cosas como Internet satelital y los continuos despliegues de fibra y 5G deberían ayudar a cerrar la brecha de ancho de banda en partes del país que carecen de acceso a altas velocidades. Pero hasta que eso suceda, pagar más por un enrutador actualizado probablemente sea excesivo.
En una situación de “pequeña tubería”, la recomendación de Coleman es centrarse en conservar el ancho de banda, especialmente en la situación donde las llamadas de trabajo de mamá están disminuyendo debido a los hábitos de Netflix de los niños. Su sugerencia: busque un enrutador con buena configuración de control parental.
“Si eres padre, puedes configurar la hora y el firewall para restringir el acceso a ciertos tipos de aplicaciones, así como ciertas horas en las que ciertas personas podrían usarlas”, dice Coleman. “Mis hijos ya son mayores, ¡pero yo solía hacerlo en el pasado!”