A la hora de comprar un ordenador portátil para trabajar es importante que conozcamos al detalle qué estamos comprando algo que, por otra parte, se extiende a cualquier otro dispositivo. Dependiendo de la actividad que vayamos a realizar, conviene que nos decantemos ante unos determinados componentes en lugar de otros para así comprar un equipo que se ajuste a lo que estamos buscando.
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Los aspectos más importantes a la hora de comprar un ordenador portátil para trabajar
El procesador y la tarjeta gráfica
A la hora de comprar un ordenador debemos elegir entre los procesadores AMD o Intel. Más allá de las diferencias, que las hay, esto es más cuestión de gustos y de experiencias previas, pero sí que debemos saber que siempre —o al menos es lo recomendable— debemos elegir un ordenador cuyo procesador sea eficiente y que cuente con más hilos de ejecución y núcleos. Por este motivo, aunque los ordenadores gaming son buenos para trabajar, los procesadores que integran no suelen ser los más adecuados, ya que sus procesadores son rápidos, pero suelen contar con menos hilos de ejecución y núcleos.
Respecto a la tarjeta gráfica, hay varias marcas, pero la que predomina actualmente es NVIDIA. Dentro de esta marca podremos encontrar diferentes gamas, siendo las más populares las RTX 3000 y 4000 (serie 30 y 40). La elección entre cada tarjeta gráfica dependerá tanto de la actividad que vayamos a realizar —si es exigente o no— y también del presupuesto.
La memoria RAM y el almacenamiento interno
A un ordenador portátil (y de sobremesa) debemos pedirle un mínimo de memoria RAM y de almacenamiento interno. Las aplicaciones consumen recursos y cada vez necesitan de una mayor memoria RAM para funcionar de forma correcta. Aunque todavía se pueden encontrar ordenadores con 8 GB de RAM, lo que recomendamos es que por lo menos cuente con 16 GB.
Lo mismo ocurre con el almacenamiento interno. Ya prácticamente no encontramos ordenadores portátiles (de sobremesa todavía hay algunos) que vengan equipados con discos duros (HDD), ya que casi todos los modelos vienen con unidades SSD, que son más rápidas y fiables. La elección dependerá del trabajo que vayamos a realizar y de los documentos, vídeos e imágenes que vayamos a guardar en el ordenador, pero el mínimo que debemos pedirle es de por lo menos 256 GB. Si es más, mucho mejor.
Diseño, peso y portabilidad
A excepción de los ordenadores gaming, los ordenadores portátiles orientados a trabajar tienen un diseño similar. Es importante tener en cuenta si vamos a utilizar el ordenador mayoritariamente en casa, fuera de ella o en ambos escenarios, eligiendo así el ordenador en función de su peso y del tamaño de la pantalla.
La pantalla de un ordenador portátil para trabajar suele estar entre las 14 y 15.6 pulgadas, un formato compacto que permite trasladarlo de forma cómoda a cualquier lugar. En cambio, la pantalla, los componentes y los materiales del ordenador serán clave para que pese más o menos. Aquí lo importante es tener claro que si vamos a utilizar el ordenador fuera de casa es mejor que tenga un peso ligero, y si su grosor es delgado mucho mejor. En cambio, si lo vamos a utilizar en casa, este aspecto no cobra tanta importancia.
Nuestras recomendaciones de ordenadores portátiles para trabajar
Acer Nitro 5
Este ordenador de la marca Acer es ideal para trabajar con aplicaciones y programas de exigencia media. Su pantalla IPS es de 15.6 pulgadas y tiene un peso de 2,5 kg. Monta un procesador AMD Ryzen 7 6800H junto con 16 GB de RAM y 512 GB de almacenamiento interno, su tarjeta gráfica es de NVIDIA (RTX 3050) y no viene con sistema operativo.
HP Pavilion Aero 13
Este otro ordenador portátil de la marca HP tiene un diseño ultraligero, lo que facilita el poder llevarlo a cualquier lugar. Su pantalla es de 13.3 pulgadas y su peso no alcanza a un kg. Por otro lado, viene equipado con un procesador AMD Ryzen 7 8840U junto con 16 GB de RAM y 1 TB de almacenamiento interno (SSD), su gráfica es una AMD Radeon y viene con el sistema operativo Windows 11 preinstalado.
MSI Katana 15
Entre los ordenadores gaming (que también sirven para trabajar con apps exigentes) nos encontramos con este modelo de MSI. Integra una pantalla de 15.6 pulgadas y, aunque su peso es de 2.25 kg, tiene un buen sistema de ventilación. Su procesador es un Intel Core i7-13620H y viene junto con 16 GB de RAM y con 1 TB de SSD. Además de ello, su tarjeta gráfica es una potente RTX 4060 y viene sin sistema operativo.
MSI Bravo 17
De la misma marca MSI, encontramos otro ordenador portátil con diferentes características que está orientado a jugar o trabajar desde casa. Este ordenador gaming integra una pantalla de 17.3 pulgadas, monta el procesador AMD Ryzen 7 7735HS y viene con 32 GB de RAM y 1 TB de SSD. Además, también integra una tarjeta gráfica RTX 4060 y viene sin sistema operativo.
HP VICTUS 16
Por último, este otro ordenador portátil HP Victus 16 integra una pantalla de 16.1 pulgadas y tiene un peso de 2.33 kg, por lo que se puede trasladar de forma cómoda, aunque está más orientado a un uso en casa. A nivel interno tenemos un procesador AMD Ryzen 7 7840HS junto con 16 GB de RAM y 512 GB de almacenamiento interno, su tarjeta gráfica es una NVIDIA GeForce RTX 4060 y también viene sin sistema operativo.