¿Son los relojes inteligentes útiles para medir tu salud?

Los relojes inteligentes prometen cuantificar aspectos cruciales de nuestra salud, pero su precisión sigue siendo cuestionable.

Recientes estudios han demostrado que, aunque pueden ser precisos en ciertos parámetros, su capacidad para medir otros aspectos importantes de la salud aún presenta desafíos.

El auge del “Yo cuantificado”

Desde que Gary Wolf introdujo el concepto de “yo cuantificado” en 2010, la idea de medir cada aspecto de nuestra vida ha ganado popularidad. Los dispositivos portátiles como los relojes inteligentes y las pulseras de actividad física han facilitado esta tendencia, permitiendo a las personas monitorear su salud en tiempo real. Hoy en día, es común ver a muchos utilizando estos dispositivos para controlar su frecuencia cardíaca, patrones de sueño y actividad física.

Sin embargo, una pregunta persiste: ¿estos dispositivos realmente miden lo que dicen medir?

Resultados prometedores pero no concluyentes

Junto con mis colegas, llevamos a cabo una revisión exhaustiva para determinar si los dispositivos portátiles de consumo pueden medir con precisión métricas de salud como la frecuencia cardíaca, el gasto energético y el sueño. Nuestros resultados fueron mixtos.

Por un lado, los relojes inteligentes pueden medir la frecuencia cardíaca con un margen de error aceptable del 3%, lo que los convierte en una herramienta útil para monitorear la salud cardíaca. Además, pueden medir con precisión la aptitud cardiorrespiratoria durante el ejercicio, utilizando indicadores como el VO2Max.

Sin embargo, cuando se trata de medir el gasto energético y el sueño, los resultados son menos precisos. Los márgenes de error en el gasto energético pueden ser significativos, mientras que en el caso del sueño, los dispositivos suelen sobrestimar la eficiencia del sueño y subestimar otros aspectos importantes como la latencia del inicio del sueño.

Desafíos en la investigación de dispositivos portátiles

Uno de los mayores desafíos en la investigación de estos dispositivos es la falta de estandarización en las metodologías empleadas para validar su precisión. Diferentes estudios utilizan enfoques distintos, lo que dificulta la obtención de conclusiones definitivas. Además, el rápido lanzamiento de nuevos dispositivos complica aún más la evaluación continua, ya que los dispositivos se actualizan más rápido de lo que la investigación puede seguir el ritmo.

Esto pone en evidencia la necesidad de un enfoque más formalizado y colaborativo en la validación de los wearables, involucrando a instituciones académicas, organismos de certificación y la industria.

Conclusiones y recomendaciones

En conclusión, aunque los relojes inteligentes ofrecen promesas interesantes para el monitoreo de la salud, los usuarios deben ser cautelosos y no confiar ciegamente en sus mediciones. Es fundamental que la investigación continúe y que se establezcan estándares claros para garantizar que estos dispositivos cumplan con sus promesas.

La colaboración entre sectores será clave para mejorar la precisión y confiabilidad de los wearables, asegurando que se conviertan en herramientas verdaderamente útiles para la salud y el bienestar.

Compartir
Exit mobile version