Los patinetes eléctricos se han convertido en uno de los vehículos de movilidad más controvertidos de nuestras ciudades. Bien por la novedad o por un uso indebido del mismo, ayuntamientos y otras organizaciones les han ido poniendo coto como buenamente han podido.
Un mini ITV a los patinetes eléctricos
Aunque los diversos organismos han ido tomando cartas en el asunto para poner coto a un uso indebido de los patinetes eléctricos, los ayuntamientos todavía tienen ciertos problemas para parar a los usuarios que utilizan estos aparatos incorrectamente.
Para facilitar una regulación única, la Unión Europea prohibió que los patinetes eléctricos superaran los 25 km/h. En España, evidentemente, hemos adoptado esta regulación, así como la DGT ha redactado una serie de normas entre las que se encuentra la imposibilidad de circular por las aceras o la necesidad de contar con un código que haga referencia a la ficha técnica del patinete eléctrico.
Esta ficha técnica tiene que recoger datos como la potencia que entrega el patinete pero los encargados de vigilar el correcto uso de los patinetes eléctricos siguen teniendo el problema de cómo comprobar que éstos no han sido trucados para alcanzar una mayor velocidad.
El aparato que realizará la comprobación
En Valencia han optado por hacerse con un aparato capaz de realizar una sencilla comprobación en la calle. Igual que ya se ha visto en otras ciudades europeas, donde este tipo de aparatos se utilizan para comprobar que las bicicletas eléctricas también dejan de prestar asistencia eléctrica cuando alcanzan los 25 km/h, la Policía Local ha presumido de aparato en X.
El aparato entrega “un certificado que determinará la velocidad máxima y la potencia del vehículo, es decir, un informe técnico con valor legal que servirá como prueba en unas diligencias policiales o en un acto administrativo”. Hasta ahora ya existían máquinas con las que poder medir la velocidad pero, aseguran, “nos era imposible adjuntar la medición en un informe o en una denuncia, así que se quedaba en una simple información sin ningún valor legal”.
Con controles puntuales, la Policía Local de la ciudad podrá controlar que los ciudadanos cumplen con las obligaciones como el uso del casco o que los patinetes eléctricos cuenten con la ficha técnica mencionada. Pero, también, si el vehículo entrega mayor potencia de la permitida, que debe estar limitada a 1000 W.
Accidentes y patinetes eléctricos en Valencia
Desde el Ayuntamiento de Valencia aseguran que se ha detectado “un aumento exponencial” de los accidentes protagonizados por los patinetes eléctricos. En 2018, se registraron 478 accidentes en los que estaban inmersos estos vehículos de movilidad personal. En 2023, se superaron los 900 accidentes.
Calculan que alrededor del 5% de los patinetes eléctricos que se utilizan en la ciudad son ilegales y que eso elevaría el número de infractores por encima de los 10.000 vehículos de este tipo.